— ¡Tómalo! —jadeó el Maestro impresor.
— ¿Qué es esto? —balbució Quirin.
El maestro Lukas lo agarró por los hombros y lo acercó a él. —lleva esto al Arzobispo Johann en Salzburgo.
¡Ahora! ¡rápido! ¡Aún es de día!
No te detengas por el camino ¡Corre!
— ¿Qué? ¿Ahora? Pero si casi es...
— ¡Corre, muchacho! —Insistió el maestro—.
Cada minuto cuenta.
¡Corre por tu vida!
Monasterio de Admont, 1486. El joven Quirin recibe de manos del maestro impresor un encargo para el Arzobispo de Salzburgo: debe llevarle el "libro de las tinieblas", en el que, dicen, el Demonio enumera las almas que ha de llevarse al Infierno. Quirin tratará de cumplir su misión a toda costa, pero un poderoso enemigo le pisa los talones...