De humanos es querer saber qué nos deparará el futuro en el amor, en la riqueza y en la felicidad, y cada año, miles de personas asisten donde los adivinos para obtener una breve mirada sobre cosas que les sucederán. La lectura del tarot en particular se ha vuelto muy popular en los últimos años, quizá por el misterio y exotismo que encierran las cartas. Las cartas del tarot trabajan no para invocar entidades ocultas o para satisfacer la magia, sino para tender un canal de las respuestas instintivas del lector, de las impresiones que provienen de su inconsciente, impresiones que según parece hacen conexión entre una selección aleatoria de cartas y los elementos de la vida de una persona. El tarot puede convertirse en una herramienta poderosa para un desarrollo personal y espiritual.